El Controlador de Tráfico Inteligente es un sistema avanzado para la regulación del tráfico vehicular y peatonal, diseñado con tecnología de vanguardia. Este controlador permite una fácil configuración y operación mediante protocolos abiertos, a través de una interfaz web o instalación en PC. Su arquitectura modular y la capacidad de manejar hasta 16 grupos programables garantizan un control eficiente en entornos de tráfico dinámico.
Soporta hasta 16 grupos programables, tanto vehiculares como peatonales.
Permite comunicación a través de múltiples interfaces, incluyendo RS-232, TCP/IP, Bluetooth y WiFi.
Sistema modular que evita la propagación de fallas y permite realizar intercambios y reparaciones en caliente.
Compatible con hasta 8 entradas lógicas para sensores vehiculares y peatonales, con programación de horarios.
Diseñado con circuitos electrónicos tropicalizados, asegurando su funcionamiento en diversas condiciones climáticas.
Funciona con una tensión de 115Vac ± 15% y consume menos de 17W, lo que lo hace eficiente en el uso de energía.
Con sistemas adaptativos y horarios programables, mejora la gestión del flujo vehicular y peatonal en tiempo real, lo que ayuda a reducir la congestión y a facilitar el paso seguro de los usuarios en intersecciones críticas.
Capacidad para registrar hasta 200 eventos de fallas, exportables a formatos como CSV o Excel, para un análisis posterior, lo que permite a los operadores identificar rápidamente problemas y tomar decisiones informadas.
Diseñado para integrarse fácilmente con otros sistemas de tráfico y control, permitiendo una implementación más fluida y una mayor versatilidad en su uso en diversas ciudades y condiciones.
La programación de los grupos de tráfico se realiza a través de una interfaz intuitiva que permite configurar fácilmente los tiempos de luz y las fases de los semáforos. Esto puede hacerse localmente o de forma remota, garantizando una rápida adaptación a las condiciones cambiantes del tráfico.
Sí, es altamente configurable y puede manejar hasta 16 grupos, con opciones de programación que se adaptan a las características específicas de cada intersección o área. Su flexibilidad permite ajustar los ciclos de luz y las fases de los semáforos según las necesidades del flujo vehicular.
El uso de un controlador de tráfico inteligente permite una gestión más eficiente del tráfico, reduce la congestión y mejora la seguridad vial. Además, facilita el monitoreo de eventos y la recolección de datos para análisis posteriores, ayudando en la toma de decisiones informadas sobre la infraestructura vial.